Carta de la Presidenta Nacional en el comienzo del curso 2020-2021

Queridos voluntarios, Hijas de la Caridad y Padres Paúles:

Aunque hemos mantenido contacto unos con otros en estos meses, resulta difícil encontrar un saludo que sea expresión de lo vivido en este tiempo, el dolor que hemos compartido, el sacrificio y, cómo no, la generosa entrega de muchos.

La pandemia ha sido y sigue siendo una situación que nos crea inseguridad, preocupación y mucho dolor por las pérdidas humanas, además de los problemas económicos, causa del empobrecimiento de tantas familias. Por todo ello nos estamos viendo totalmente desbordados para poder cubrir las necesidades básicas.

Esto nos ha dejado al descubierto una sombra muy grande: La avanzada edad de la mayoría de los miembros y la enfermedad nos han impedido realizar muchos servicios a nuestros hermanos más vulnerables.

Se nos presenta un reto que tenemos que afrontar para poder dar respuesta a las necesidades que se están presentando.

Utilicemos nuestra creatividad, ayudémonos mutuamente, unamos las fuerzas espirituales y materiales de toda la Familia Vicenciana. Ya hemos comprobado la generosidad de JMV dando respuesta en el reparto de alimentos. Pero no tenemos que esperar que los jóvenes vengan, acerquémonos a ellos y pidamos su ayuda.

Todos somos responsables, cada uno desde el servicio al que nos ha llamado el Señor.

El Papa Francisco nos recuerda:

«No estamos solos, el Señor nos precede en nuestro caminar removiendo las piedras que nos paralizan».

Es necesario que nos reunamos, que estemos unidos, aunque seamos pocos; recordemos que el Señor está entre nosotros, por tanto, no tengamos miedo, hemos sido elegidos y estamos llamados a vivir y trabajar por los más pobres. La seguridad de la protección del Señor no nos priva de la responsabilidad de llevar a cabo las normas establecidas que ya venimos cumpliendo: higiene, distancia prudente y uso de mascarilla.

Sigo unida a todos vosotros y a vuestras intenciones en la oración. También pido al Espíritu Santo que nos dé la sabiduría y la luz para discernir lo que el Señor nos pide en este momento concreto y sepamos dar lo mejor de nosotros.

Un abrazo.

Concepción Santiago Alonso
Presidenta Nacional de AIC

Si deseas descargar documento en pdf, pincha en el siguiente enlace:

Carta de la Presidenta Nacional en el comienzo del curso 2020-2021